(Del francés, mode y este del latín, modus, modo o medida) Indica en su significado más amplio una elección o, mejor dicho, un mecanismo regulador de elecciones, realizados en función de unos criterios de gusto.
El termino moda se refiere al”uso, modo o costumbre que está en alza durante algún tiempo, o en determinado país, con especialidad en los trajes, telas y adornos sobre todo los recién introducidos”.
Según el marketing, la moda es fenómeno eterno y siempre nuevo, universal y concreto, que tiene sus raíces en la imitación.
Moda seria lo actual, o lo que está en vigor e interesa a una mayoría en un tiempo determinado. Aplicada a la indumentaria es aquel atuendo, estilo, prenda, color o complemento que se lleva por parte del grupo socialmente más importante o hegemónico, que es capaz de influir en los demás.
NACIMIENTO DE LA MODA
La moda es algo cultural, expresa el espíritu del tiempo y es uno de los indicios más inmediatos de los cambios sociales, políticos, económicos y culturales. Moda es lo que más se repite ya sea en el mundo de la costura o en matemáticas. Un ejemplo es: si se pusiera de moda el rubio la mayoría de las chicas se teñirían es cabello para tenerlo de ese color y estar a la moda. Forma parte de la sociedad.
HISTORIA DE LA MODA
PREHISTORIA
HOMBRE DE CROMAGNON
En 1886, en la pequeña gruta de Cromagnon fueron encontrados varios esqueletos que permitieron afirmar que el hombre de esa raza alcanzaba una talla de 1,80 m, era robusto y vigoroso, de cráneo alargado y voluminoso, ligeramente aplanado en el occipucio, con una frente alta y arcos superciliares apenas salientes.
El rostro, algo ancho en los pómulos, mostraba una nariz estrecha y larga. La mandíbula inferíos tenia in mentón bastante pronunciado.
Los hombres y las mujeres de esa raza –qué vivió durante el periodo Paleolítico- cubría el cuerpo con pieles a manera de taparrabos, que sujetaban con tiras de cuero crudo; se adornaban con collares hechos con las uñas y los dientes de los animales que cazaban para su sustento, así como también de caracolillos, que enhebraban en finas tiras de cuero.
Es posible afirmar que conocían el fuego, el cual era conservado ritualmente.
Ante el avance de los glaciares, el hombre tuvo que refugiarse en las cavernas naturales para poder soportar los crueles fríos que sobrevinieron. Comenzó a utilizar nuevos elementos para la confección de las ropas de abrigo que se vio forzado a vestir. Con astillas pulidas de hueso creó la aguja y cosió sus prendas, con las que llegó a cubrir enteramente su cuerpo.
También empleó el marfil, que tallaba dándole formas diversas, y comenzó a decorar el interior de las cavernas que lo cobijaban con las figuras de animales primorosamente dibujados y pintados.
Estas manifestaciones de arte marcan los albores de una cultura que revela cómo las circunstancias crean en el hombre la renovación de sus ideas para una vida mejor.
Hacia el año 1910 la vestimenta femenina abandonó la austeridad característica de fines del siglo anterior y se hizo más suntuosa. Volvieron las telas como el terciopelo, el brocado, las sedas brillantes, los encajes y los bordados. La falda, ya sin miriñaque, se recogía con pliegues que le daban un movimiento en particular. La chaqueta de brocado llegaba hasta la cintura y tenía adornos de piel de zorro blanco en el cuello, en los puños o en manguitos para abrigar las manos.
Los sombreros tenían gran importancia en la indumentaria. Por lo general eran de ala ancha: en invierno, de fieltro o terciopelo con adornos de pieles y plumas: en verano, de paja con flores, pequeñas frutas de tela y tul. El accesorio más común era el bolso y se confeccionaba de terciopelo o de raso bordado con piedras o perlas. El calzado era, por lo general, de raso o de gamuza con tacones altos.
Hacia el año 1925 la falda en el atuendo femenino llegó hasta la rodilla. Nunca, hasta entonces, en la historia de la moda la mujer elegante había llegado a usar una falda tan corta. Pero luego volvió a descender y a medianos de la década de los años treinta los vestidos de día estaban a unos 25 cm del suelo y los de fiesta tocaban el mismo. La línea de la cintura duró hasta los últimos años de la década, tiempo en el cual comenzó a subir lentamente y la cintura recuperó su lugar normal. El cabello –que en la década anterior se usaba corto- volvió a usarse más largo-. Se generalizó el empleo de cosméticos tanto para la mujer joven como para la de más edad. El calzado escotado y el escarpín se usaban durante todo el año.
Los caballeros llevaban trajes de franela, principalmente con rayas blancas sobre fondo gris, camisa blanca y corbata de colores. El rancho era, en verano, el típico sombrero masculino.
1930-1960
Los diseñadores intentaron revivir la opulencia de años anteriores, en donde el lujo regía la moda. Durante este intento fallido Europa nuevamente entro en guerra en 1939. El abrumador poder nazi influyo en la moda de los años cuarenta y esta fue opaca y se baso en un estilo militar. El traje de dos piezas y la sencillez de los materiales representaron la pobreza del viejo continente, que ocultó la escasez con recursos que desataron toda la creatividad en peinados, maquillaje y atuendos como guantes, pañuelos y bolsillos falsos en las chaquetas.
París se encontró bajo ocupación nazi y Londres se debatía con sus ultimas fuerzas; debido a esto, la industria textil y de la moda dejó de ser importante y Estados Unidos se vio en la necesidad de crear su propia moda.1945
Con el término de la guerra de nuevo se buscó la luminosidad y el glamour de tiempos pasados; la nostalgia llenó de elegancia y sofisticación los años cuarenta. La melena soigneé, estilo Marilyn Monroe, reemplazó a los moños y sombreros de los la década de los cuarenta y las pieles finas, cachemiras y joyas se propagaron por toda Europa.
La oposición de esta elegancia fue “la moda estudiantil”, que era mas desordenada y cómoda y era utilizada por toda la nueva generación. A mitad de los años cincuenta apareció el estilo beatnik, cuyo comienzo callejero y popular estaba directamente ligado a la música rock que venia desde América con iconos como Elvis Presley. El grupo ingles The Beatles creo una moda particular de melenas largas y botas puntiagudas y elevadas, lo que causó una gran revolución social que reto los rígidos cánones a los que la juventud estaba sometida. De hecho, la moda siempre había girado en torno a mujeres y hombres sin distinguir a los adolescentes como tal.
A mediados de los años sesentas la diseñadora Mary Quant innovo y revolucionó por completo la industria de la moda imponiendo la “mini”, que se reducía a un pedazo de tela. Esto produjo la ira y el escándalo de loa padres y sectores tradicionales, los que otorgaron la inmortalidad del vestir a la música satánica. Esta época era consecuencia de la liberación juvenil. Esto también se reflejó en las artes, manifestándose principalmente en el arte rupturista y transgresor del “pop art” de Andy Warnol. El atuendo tenía dos esquemas bien precisos. Por un lado estaba la moda “Little girl”, una mescla de inocencia y sensualidad y la moda de formas geométricas y rectas que comenzaron a mostrar abiertamente el cuerpo. Esta última se inspiro en la creciente competencia entre Estados Unidos y la URSS por conquistar el espacio durante la llamada guerra fría. Los materiales también cambiaron, las telas dieron paso al plástico, el cual se empezó a usar no solo en la ropa, sino también en todo tipo de accesorios como zarcillos, collares y carteras.
La guerra diferencio aun mas las relaciones entre adultos y jóvenes, ya que mientras los primeros apoyaban la intromisión estadounidense en el país oriental, los últimos proclamaban todo un movimiento político y social fundado en la paz y el amor.
París se encontró bajo ocupación nazi y Londres se debatía con sus ultimas fuerzas; debido a esto, la industria textil y de la moda dejó de ser importante y Estados Unidos se vio en la necesidad de crear su propia moda.1945
Con el término de la guerra de nuevo se buscó la luminosidad y el glamour de tiempos pasados; la nostalgia llenó de elegancia y sofisticación los años cuarenta. La melena soigneé, estilo Marilyn Monroe, reemplazó a los moños y sombreros de los la década de los cuarenta y las pieles finas, cachemiras y joyas se propagaron por toda Europa.
La oposición de esta elegancia fue “la moda estudiantil”, que era mas desordenada y cómoda y era utilizada por toda la nueva generación. A mitad de los años cincuenta apareció el estilo beatnik, cuyo comienzo callejero y popular estaba directamente ligado a la música rock que venia desde América con iconos como Elvis Presley. El grupo ingles The Beatles creo una moda particular de melenas largas y botas puntiagudas y elevadas, lo que causó una gran revolución social que reto los rígidos cánones a los que la juventud estaba sometida. De hecho, la moda siempre había girado en torno a mujeres y hombres sin distinguir a los adolescentes como tal.
A mediados de los años sesentas la diseñadora Mary Quant innovo y revolucionó por completo la industria de la moda imponiendo la “mini”, que se reducía a un pedazo de tela. Esto produjo la ira y el escándalo de loa padres y sectores tradicionales, los que otorgaron la inmortalidad del vestir a la música satánica. Esta época era consecuencia de la liberación juvenil. Esto también se reflejó en las artes, manifestándose principalmente en el arte rupturista y transgresor del “pop art” de Andy Warnol. El atuendo tenía dos esquemas bien precisos. Por un lado estaba la moda “Little girl”, una mescla de inocencia y sensualidad y la moda de formas geométricas y rectas que comenzaron a mostrar abiertamente el cuerpo. Esta última se inspiro en la creciente competencia entre Estados Unidos y la URSS por conquistar el espacio durante la llamada guerra fría. Los materiales también cambiaron, las telas dieron paso al plástico, el cual se empezó a usar no solo en la ropa, sino también en todo tipo de accesorios como zarcillos, collares y carteras.
La guerra diferencio aun mas las relaciones entre adultos y jóvenes, ya que mientras los primeros apoyaban la intromisión estadounidense en el país oriental, los últimos proclamaban todo un movimiento político y social fundado en la paz y el amor.
Esta libertad abrió un mundo lleno de perspectivas y conocimientos que antes no estaban al alcance de los jóvenes, con lo que los excesos llegaron apresuradamente a través de la experimentación con drogas, en especial aquellas alucinógenas como el LSD. Las mentes distorsionadas crearon un estilo fantasioso y onírico inundado de formas y colores en las telas. Ese fue el nacimiento de la era de la psicodelia y el hipismo de los “libres” años setenta.
LA FALDA CUESTA ARRIBA Y CUESTA ABAJO
Los “felices” años veinte traen consigo el mayor escándalo que jamás se había visto con la falda a nivel de la rodilla. El pudor femenino deja de marcar la pauta.
La mujer “espárrago” es la de moda y con ella desaparece la afirmación del busto y la cadera. El vestido se ve como un tubo que acaba en la rodilla. Llegan los años treinta, época mas benevolente con la moralidad de la vieja villa; por ese entonces se alarga la falda, se insinúan las curvas femeninas y las mujeres aspiran a mostrar hombros anchos con grandes hombreras y caderas estrechas. Los años sesenta irrumpen con un hecho originado en Inglaterra pero que revoluciona el mundo entero: llega la minifalda. Mary Quant, conquista el mercado mundial con una moda que en su inicio provoco escándalo y hasta la desaprobación del mismo vaticano. La minifalda habría logrado imponerse como fenómeno mundial y según su diseñadora “era la respuesta a los sentimientos de la sociedad de los sesenta. Denotaba optimismo y sugería alegría y liberación”. (El tiempo, 1968.) Posteriormente surge la maxifalda, también de origen ingles, que aunque tuvo sus repercusiones en el mundo de la moda no se mantuvo por mucho tiempo.
LA MODA EN LOS AÑOS 50 Y 60
El cambio de la década de los cincuenta a la de los sesenta apenas afecto a la moda hasta el año 1962. En ese momento, los cambios aumentaron de ritmo. Se abandonan los cardados convirtiéndose en unas metas inferiores ligeramente echadas hacia la cara. Empieza un nuevo movimiento juvenil: las ye-ye. Fueron años caracterizados con vestidos princesa o imperio con escotes redondos o bateau (barco) y mangas cortas. Jóvenes y señoras cambian sus vestidos juveniles por infantiles con trajes sencillos y melenas lisas y cortas, zapatos de medio tacón y maquillaje suave y discreto. Los trajes de chaqueta son muy cortos y entallados excepto en la falda, que se va separando en su caída de las piernas. Los bolsos, siguiendo la línea de los sombreros, son de tipo campesino, enormes y de paja adornados con flores o lazos. Poco a poco la falda se va acortando. A mediados de década todas las colecciones europeas permiten ver la rodilla.